Hola queridos lectores, ya sabéis que estas vacaciones me han cundido mucho, y que las he hecho por España por el tema del covid, aun así he descubierto lugares preciosos y me lo he pasado genial.
En esta ocasión nos fuimos bastantes días a un resort con pensión completa en La pineda, Tarragona, España. Estuvimos en Hotel Palas.
El hotel era bonito y la zona nos encantó, aunque ya la conocíamos, la zona.
Mi queja bastante grande es por el tema del covid, y nos ha pasado en TODOS los hoteles que hemos pasado noche este año, de medidas covid, nulas, no limpian lo suficiente, los bufets todos tocamos todo y sin guantes, lo que hace que lo que venden al respecto no es cierto.
Por otra parte, los primeros días estuvimos genial, cuando se acercaba el jueves, de cara a fin de semana, fatal, la comida al principio bien y luego ya cada día ponían lo mismo y casi sin variedad, acabamos comiendo pizza, ensaladas, y sandia porque no había ni yogures naturales, un desastre en ese sentido y al precio que nos costó bastante alto, esperábamos mejor el bufet.
Si vimos a la gente pelear por las tumbonas igual que reservarlas y eso que está prohibido, ni lo vigilan ni nada de nada.
La limpieza lo mismo, los dos primeros días bien y luego ya ni te dejaban jabón de manos!!!!
Yo no me peleé por tumbonas, si había bien y si no a la playa.
La piscina de la zona vip muy chula eso si. Aunque el agua un pelín turbia, mi piscina de casa está muchísimo mas limpia.
Nos hinchamos a beber eso si, jajaja, sobre todo piña colada, patatas y aceitunas, ahora tengo que hacer mucho deporte.
Por fuera, habían sitios muy chulis.
Y las vistas estaban estupendas, la verdad. La habitación no hice foto pero estaba bien.
Y hacían espectáculos cada noche. Ya tenía ganas yo de retomar estas actividades de veraneo.
El primer día genial, el tercero ya de capa caída, que pena. Aunque a pesar de todo el hotel me gustó comparándolo con otros que estuve este año, pero claro, el precio también era mas alto que en otros de la zona.
La playa a medida que avanzaron los días, la gente se fue olvidando de covid y distancias, casi encima los tenias, era una locura. Igualmente aquí también dejaban por la mañana las tumbonas y se iban, ole sus..... deberían multar YA o robárselas para que se les quiten las ganas de hacer reserva con todo su morro.
Y todo lo bueno se acaba, ya toca volver a cocinar en casa. Aunque tengo que admitir que tenía ganas de volver.